Una vez más el pueblo argentino paga
con otra tragedia el desguace y el vaciamiento al que durante décadas ha sido sometido
el sistema ferroviario, frente a esta nueva herida para el pueblo argentino,
nuevamente se carga contra los trabajadores como si nosotros fuéramos los
responsables de la inseguridad que padecen hace años los pasajeros y también
los trabajadores. En numerosas ocasiones hemos demostrado que tanto
trabajadores como usuarios somos víctimas de las políticas del triangulo de corrupción:
los empresarios, las direcciones sindicales (en nuestro caso la fraternidad) y
los funcionarios corruptos del Estado, que han llevado a los trabajadores
ferroviarios a la precariedad laboral y a los usuarios a padecer un servicio
deplorable, que ya ha costado muchas vidas.
Triangulo de corrupcion
Desde septiembre, tanto la prestación del
servicio como las obras de infraestructura ferroviaria han pasado a manos de
dos sociedades estatales: la Operadora Ferroviaria Sociedad Del Estado y la
Administración De Infraestructuras Ferroviarias Sociedad Del Estado. Sin
embargo, lejos de los anuncios de la propaganda oficial, ambas sociedades
avalaron a los concesionarios y sus socios del triangulo de corrupción
ferroviaria, las direcciones sindicales cómplices y los funcionarios del estado
que permitieron el desguace, la destrucción y los negociados con el patrimonio
ferroviario. Compraron chatarra a Portugal y a España, en tanto despilfarraban
los millonarios subsidios, acelerando de esta forma el colapso actual del
sistema ferroviario y el fracaso de estas sociedades. Detrás de los rutilantes
anuncios oficiales del Ministerio de Transporte no hay más que la continuidad
del modelo de vaciamiento y negociados que durante décadas nos robó el derecho
al transporte público y con él la oportunidad de ponerlo al servicio de nuestra
soberanía nacional, con el agravante de una interna política entre los viejos y
los actuales funcionarios. Las vías siguen en estado terminal, mientras se
anuncia por televisión que se cambiaron los durmientes. Se siguen pagando
millones en subsidios a los Cirigliano, los Roggio, se siguen pagando millones
en importaciones de maquinaria que podría producirse en el país, mientras se
anuncia por televisión que se instalaron cámaras de seguridad en las cabinas,
como la solución de fondo. Los resultados de estas políticas están
lamentablemente a la vista, una vez más.
Desde el MONAFE seguimos proponiendo la
creación de una Empresa Nacional con nuevos organismos de control y gestión
popular que permita la reconstrucción integral de los ferrocarriles en
Argentina, para que vuelvan a circular los trenes en todas las provincias; que
se recupere el servicio de carga; que se ponga fin a la dependencia tecnológica
extranjera, finalmente se impulse la reindustrialización ferroviaria que
permitiría la reactivación de decenas de talleres y el empleo de mano de obra
argentina. El ferrocarril debe estar al servicio de un proyecto de país que
contemple el bienestar de todos y todas sus habitantes. Esta lucha que hace
años estamos llevando adelante como MONAFE, ya no la hacemos solos:
trabajadores ferroviarios y usuarios del ferrocarril hemos comprendido que
debemos unirnos y dar la pelea juntos para que con la recuperación de los
ferrocarriles queden definitivamente al servicio de los intereses de nuestra
patria.
Movimiento
Nacional Ferroviario
Adhieren: Asociación Civil Tren Para Todos, Autoconvocados Por Los Trenes, Organización Libres del
Pueblo (OLP), Movimiento Emancipador, Camino de los Libres, Barricada TV, COB La Brecha, Comision Salvemos Al Tren Lobos, Corriente Unidad Sur, Encuentro por la Unidad
Latinoamericana y el Cambio Social (MULCS), Vias Sarmiento, SUBI Somos Usuarios Bien Indignados, ATE Municipales de San Martín.
No hay comentarios:
Publicar un comentario